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Hoy es siempre todavía

Deporte

Sobrenatural

Sobrenatural

La final de los 100 metros es uno de esos momentos mágicos de unos Juegos Olímpicos. Y si el último clasificado marca un tiempo de 10.03 s, los seis primeros bajan de diez segundos, cinco atletas hacen mejor marca personal, se baten dos récords nacionales y el récord mundial, no se puede pedir más. Ese prodigio de la naturaleza de nombre Usain Bolt, natural de Jamaica, ha ganado la medalla de oro en la prueba reina del atletismo con una superioridad aplastante, dejándose ir en los últimos metros (no me atrevo a imaginar dónde habría dejado el crono si hubiera disputado la carrera hasta el final) y consi-guiendo batir el récord del mundo al parar el crono en 9.69.

En ocasiones, parece que el ser humano no tiene límites. Si hace unos años bajar de diez segundos era toda una proeza, y parecía que poco más se podría rebajar este tiempo, este jamaicano nos hace pensar en que, si continúa con su progresión (no olvidemos que tiene tan solo 21 años), podría acercarse a 9.60.

Para empezar, hoy ha recorrido los cien metros a una velocidad media de 37,15 km/h. Más que correr, parecía que se deslizaba sobre la Mondotrack FTX, esa "pista milagrosa" que han instalado en el "nido" de Pekín.

Nadal estrenará número uno con una medalla olímpica

Nadal estrenará número uno con una medalla olímpica

No vamos a esperar a la final del domingo ante el chileno Fernando González. Rafael Nadal ha conseguido esta tarde en España el pase para la gran final del torneo olímpico de tenis tras vencer a un gran Djokovic por un marcador global de 6-4, 1-6 y 6-4.

Personalmente he visto el partido perdido en el segundo set, pero está claro que el mallorquín tiene más fe en sí mismo que la que tengo yo en él. Y eso que el partido parecía que iba a ser fácil tras el primer set, que ganó Nadal casi sin despeinarse tras dos breaks. Pero en el segundo el serbio mostró porqué ocupa la posición que ocupa en el ranking ATP. Si hace poco ya venció a Rafa en el Master de Cincinatti, en poquito más de media hora se apuntó el segundo set, desarbolando el juego del español.

Y llegó el definitivo tercer set, en el que no había tie-break. Cada tenista aguantó su servicio, Nadal con algún problema que otro, pero evitando que Djokovic le rompiera el servicio para llegar ganado 5-4 al momento decisivo. En el décimo juego, Nadal resistió cada uno de los demoledores golpes que le mandaba el serbio. Desaprovechó una primera bola de partido. Lo mismo hizo Djokovic para empatar a cinco y, por último, en uno de esos puntos que sólo Rafa es capaz de ganar por tesón y constancia, devolviendo una y otra vez las embestidas de Djokovic, éste falló incomprensiblemente un smatch que envió fuera.

Otra vez un emocionado Nadal, como en Wimbledon, saboreaba un nuevo triunfo, que añadirá a su número uno del próximo lunes. Gane o pierda el domingo, es el mejor deportista español de la actualidad con diferencia.

Desde aquí todo nuestro ánimo para que haga un último esfuerzo y se cuelgue una medalla de oro, por el bien de un algo decepcionante deporte español en Pekín.

Épica victoria del futuro Nº 1

Épica victoria del futuro Nº 1

Recurriendo a los tópicos, la final de Wimbledon de ayer tarde es de las que hacen afición. Los dos mejores tenistas del mundo en la actualidad. Casi cinco horas de partido. Dos suspensiones por la lluvia. Dos tie-breaks y un último set que terminó con un tanteo de 9-7 para un resultado final de 6-4, 6-4, 6-7, 6-7 y 9-7 a favor de Rafa Nadal, que si no es el número uno del ranking ATP es, sin lugar a dudas, el tenista con más garra y poderío de la actualidad, y no sólo en tierra, como había demostrado hasta ahora. De hecho, es de los poquitos que ha conseguido la victoria en Roland Garros y Wimbledon en el mismo año (el último en hacerlo fue el mítico Bjorn Borg en 1.980). Y uno de los dos que han ganado el mismo año Roland Garros, Queen’s y Wimbledon (el otro, en 1.962, fue Rod Laver).

Han pasado 42 años desde el último título individual masculino (no hay que olvidarse de Conchita) conseguido por Santana, en blanco y negro. Y la espera ha merecido la pena. El partido de ayer fue memorable y, en honor a la verdad, tras un gran comienzo de Rafa, con los parones, llegó a un punto en el que cualquiera podía haber ganado. Y es que no eran dos cualquieras los que medían sus fuerzas en el All England Club. Algunos de los puntos son para guardarlos en DVD, el partido entero en sí lo es.

Y más el último set, sencillamente increíble. Con 2-2 en el marcador y 40-40 aparece de nuevo la lluvia. Parecía que el partido no terminaría ayer domingo, pero al final el tiempo se sumó a la fiesta y permitió que terminara una magnífica final.

Se notaba que Rafa estaba más emocionado que otras veces. Y no es para menos. A sus veintidós años poco más puede pedir. El nº 1 del ranking lo tiene a tiro de piedra en el US Open. Si no lo es ya es porque ha coincidido en el tiempo con tal vez el mejor tenista de todos los tiempos. Tal vez dentro de unos años se diga esto mismo de él.

¡¡ Campeones de Europa !!

¡¡ Campeones de Europa !!

Por ochenta y cinco días no fui testigo de la victoria de España sobre la Unión Soviética en la Eurocopa de 1.964. Es evidente que de poco me habría servido para recordar algo de aquel triunfo. La Eurocopa de 1.984 sí la recuerdo, sobre todo aquella infausta final en la que, para mí, el mejor portero que he visto jugar en un terreno de juego, Luis Miguel Arconada, encajó aquel gol de infortunio para acabar perdiendo por 2-0.

Desde entonces, un gran aficionado al deporte en general como yo había tenido la oportunidad de ver cómo conseguíamos los más extraordinarios logros tanto a título individual como colectivo: ganábamos el Tour de Francia, el Giro, mundiales de ciclismo, europeos y mundiales de fútbol-sala y waterpolo, medallas olímpicas (incluida la de los 1.500 m en Barcelona), campeonatos del mundo de motociclismo, la Euroliga, la Champions, Roland Garros, la Ryder Cup, ... Y últimamente, campeonatos del mundo de balonmano y baloncesto, campeonatos del mundo de pilotos de F1, y hasta la Copa Davis.

Pero faltaba siempre la guinda. Casi nos habíamos acostumbrado a no lograr ningún campeonato importante (europeo o mundial) en el deporte rey, el fútbol. Siempre terminábamos hablando de la mala suerte, de la maldición de cuartos, del fatídico punto de penalti y tantas y tantas otras cosas.

Hasta anoche. Una selección que en algunos instantes, como en la segunda parte de la semifinal ante Rusia, nos ha hecho recordar el "dream team" de Cruyff ha conseguido una más que justa y merecida victoria en la Eurocopa de Suiza y Austria, y jugando bien al fútbol, como no suele ocurrir, dejando por el camino a algunos de los de siempre: Italia y Alemania. Con solvencia, incluso perdonando alguna que otra goleada, maravillando al mundo entero por la calidad de su fútbol.

Y consiguiendo que toda España se pegara al televisor (los que no estaban en Viena, que merecen comentario aparte por su ánimo a la selección y su ejemplar comportamiento) para ver como todos, del primero al último, incluido el cuestionado Luis Aragonés, levantaban la copa de campeones, a la que le sientan muy bien las cintas rojas y amarillas.

Desde aquí felicito a todos los jugadores, a los que lo han peleado en el terreno de juego y a los que han animado desde el banquillo, al entrenador y a todos por haber sufrido hasta llegar a la victoria. Nos la merecíamos. Y ahora, a por el Mundial del 2.010. Aunque primero habrá que clasificarse para Sudáfrica.

A por el Tour

A por el Tour

Si ya antes se había adjudicado su segunda Lieja-Bastoña-Lieja (fue el primer español en conseguir la victoria en esta clásica en 2.006), el ciclista murciano Alejandro Valverde demostró que está en buena forma y con moral para adjudicarse el próximo Tour de Francia al ganar la VX edición de la Dauphiné Libéré.

Valverde obtuvo el maillot amarillo en las contrarreloj y controló a sus rivales en los puertos. La buena actuación de su equipo, Caisse d’Epargne, permitió al de Las Lumbreras quedar por delante del australiano Cadel Evans, que quedó segundo en la clasificación general a 39 segundos de Alejandro.

Valverde es el sexto corredor español que consigue la victoria en esta prueba que tradicionalmente sirve de preparación para el Tour de Francia y en cuyo historial figuran Luis Ocaña y Miguel Induráin, por partida doble, Valentín Uriona, Iban Mayo e Iñigo Landaluze, último ganador español hace tres años.

Cuarto Roland Garros consecutivo

Cuarto Roland Garros consecutivo

Si Rafa Nadal se exhibió en Hamburgo ganando a Roger Federer en la final y a Novak Djokovic en la semifinal, esta vez ha mostrado una superioridad insultante sobre sus rivales en Roland Garros, sin perder un solo set. Es más, no ha perdido ni un solo partido en las pistas parisinas pues se ha hecho con su cuarto entorchado consecutivo en París, igualando a un mito de este deporte, el sueco Björn Borg, que aplastaba a sus rivales cuando nosotros éramos unos críos allá por finales de los ochenta.

El marcador de la final lo dice todo: 6-1, 6-3 y 6-0, en un partido perfecto, con un juego demoledor que no dio opción alguna al suizo, que sigue sin ganar este Gran Slam. No cabe duda de que estamos ante uno de los mejores tenistas españoles de todos los tiempos, aunque siga sin alcanzar el número uno del mundo y esté acosado por el serbio Kjokiovic. Sin duda, merece ese premio.

Exhibición de Rafa Nadal antes de Roland Garros

Exhibición de Rafa Nadal antes de Roland Garros

Hasta ahora a este blog se habían asomado brillantes deportistas españoles como Fernando Alonso, Pau Gasol, Rudy Fernández, Ricky Rubio, Dani Pedrosa, Jorge Lorenzo o nuestro paisano Alejandro Valverde. Este maravilloso elenco estaría incompleto sin Rafa Nadal, que el sábado y el domingo brilló a gran altura en el Masters Series de Hamburgo,  en su primera victoria en este torneo (y tercer título de la temporada), hasta ahora coto privado de Roger Federer.

El partido de semifinales ante Novak Djokovic (7-5, 2-6 y 6-2) supuso su primera gran prueba de fuego, pues estaba en juego la segunda plaza del ranking de la ATP y, tras  desplegar su gran tenis sobre tierra batida, las que le han convertido en el mejor del mundo en esta superficie, y salvó con su garra y clase su lucha por desbancar al suizo del número uno en el que lleva instalado ya si se sabe desde cuando.

Rafa y Roger reeditaron el domingo la final del año pasado en la que éste último acabó con una racha de victorias sobre tierra que parecía no tener fin (2-6, 6-2, 6-0). Sin embargo, esta vez el triunfo cayó de lado del español (7-5, 6-7 y 6-3) tras casi tres horas de juego.

Rafa no comenzó nada bien, y prueba de ello es que en menos de media hora perdía 5-1 con servicio de Federer para anotarse el primer set. Por si faltaba algo, negros nubarrones aparecieron cuando Nadal tenía que ser atendido por el fisio.

Y a partir de ahí, una remontada increíble. Siete juegos ganados seguidos para apuntarse el primer set y romper el servicio del suizo en el primer juego del segundo, que cayó de lado de Roger en el tie-break. Pero el triunfo llegó tras un último parcial de 6-3.

Y el domingo, Roland Garros.

Segunda victoria foránea que aclara la permanencia

Segunda victoria foránea que aclara la permanencia

El Polaris World CB Murcia ha dado esta mañana en Fuenlabrada un paso casi definitivo para permanecer una temporada más en la liga ACB al vencer en otro partido no apto para cardíacos al Alta Gestión Fuenlabrada, al que deja con dos victo-rias menos y la ventaja del basket average.

Desde luego, el equipo ha elegido bien la cancha en la que conseguir su segunda victoria fuera del Palacio de los Deportes de la capital. Si el primero fue ante el MMT Estudiantes, todavía en puesto de descenso, hoy ha derrotado a otro equipo que lucha por eludir esas posiciones y que en la primera vuelta venció en Murcia por un punto después de una remontada increíble.

En el primer cuarto, el equipo no parecía el que suele jugar fuera de casa, consiguiendo rápidamente una cómoda ventaja apoyada en una línea exterior casi perfecta (25 puntos en los diez primeros minutos). Pero en el segundo cuarto la cosa cambió como de la noche al día. Los cambios en el quinteto titular y la entrada de Ferran López hicieron que ambos equipos se fueran al vestuario con empate en el marcador (38-38).

El otras veces maldito tercer cuarto fue esta vez el del despegue murciano, con un Lou Roe soberbio, que anotó 13 puntos para acabar con 10 puntos de ventaja, que parecían suficientes, aunque la salida a la cancha de Saúl Blanco colocó a los madrileños a tres faltando tres minutos para el final.Y a partir de ese momento, la locura: Polaris ganando de dos, ganando de tres, ganando de uno. Faltas y más faltas. Triples y más triples. La victoria estaba en el alero y al final cayó del lado murciano, y también el average, que sitúan al AG a 2+1 victorias.

Concluída la jornada, el CB Murcia ocupa una cómoda onceava posición, con cinco victorias más que León y cuatro más que Estudiantes. Y con dos más que un grupo formado por Fuenlabrada, Manresa y Cajasol, que visita el próximo domingo el Palacio. Una victoria sobre el conjunto sevillano y una derrota de Estudiantes en Canarias podría certificar matemáticamente la permanencia.